Como podéis ver os presento mi foto de cuando celebré mis primer cumpleaños. Bueno, mejor decir que yo no celebré nada, que lo celebraron mis padres haciendo la tarta y tomando las fotos, quizás que ese día no me pareció nada extraordinario. Es cierto que no se puede recordar nada de esta edad. Puedo contar solo las cosas que me contaban mis padres. Dicen que era una niña muy contenta y feliz. ¿Se puede ver aquí no? :) Me reía todo el tiempo y casi no lloraba. Era lo contrario a mi hermana que era muy dependiente de nuestra madre. Cuando mi madre salía de casa o nos dejaba con los abuelos, mi hermana siempre lloraba pero a mí no me importaba nada.
Creo que tuve una infancia muy bonita. Vivíamos en una ciudad pequeña y por eso podía salir de casa sin problemas. Muy a menudo jugabamos en un campo de trigo, al borde del río o construíamos casas entre las ramas de los árboles. Todas las vacaciones las pasabamos en casa de la abuela que tenía un gran huerto y muchos animales.
Con aproximadamente siete años encontré nuevos amigos que vivían cerca de mi casa. ¡Eran grandes gamberros! Me enseñaron muchas palabrotas y los primeros problemas llegaron. Me acuerdo que hacíamos competiciónes como quién pude más eructar o escupir, nos peleabamos etc. No era ningúna princesita. A decir verdad, me parece raro que cuando estoy contando estas cosas no recuerdo los castigos pero solo las cosas divertidas. A los pocos años nos mudamos y yo perdí estos amigos. Creo que mis padres se quedaron contentos porque finalmente tuvieron una hija ejemplar. ;)
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